De las frases más bonitas que hay cuando alguien nos regala algo es “vi esto y pensé en ti” o también “esto es muy tu” porque detrás de estas existe un significado no solo de lo bien que esa persona nos conoce, sino también del como las marcas conectan tanto con su cliente que les venden una historia en la cual quizás ellos mismos no encajan pero si alguien especial que los rodea y justamente se convierte en la opción de regalo ideal para sorprender en alguna fecha especial, no necesitan buscar más porque ese producto no solo satisface una necesidad, representa las características y gustos de ese familiar, amigo o persona cercana, con solo ver ese producto saben que ahí pueden imaginar a esa persona.
Esa es la importancia de las historias de marca, de las historias detrás de una campaña, no es contar como nació la marca o como se creó el producto, es plantear un escenario hipotético y alrededor de ese escenario comenzar a pensar ¿qué historia le voy a contar a mi cliente para que, al ver mi campaña, al ver un reel, al ver una foto se imagine viviendo esta historia? El fin de las historias es esa, que nuestro cliente se sienta identificado con el relato, que se imagine como el protagonista y quiera hacer parte y en el caso de los regalos, las historias nos ayudan a que esos clientes puedan ver como protagonistas de relatos a sus personas especiales y saber que en nuestra marca encontrarán aquello que realmente representa a quien va dirigida esa
campaña. En navidad nos enfocamos mucho en el solo hecho de vender, el cual es importante por supuesto, pero si queremos lograr este objetivo ¿qué le vas a contar a tu cliente para que conecte con tu marca? ¿Qué historia van a contar tus productos para que tus clientes conecten esos productos con las características de sus seres especiales y los obsequios que están buscando? Muchas veces tenemos claro que lo que la otra persona desea o necesita es un producto específico, pero entonces ¿cómo vas a hacer resaltar tu producto? Puede haber muchos productos iguales y cumpliendo una función similar pero cuando estamos en la búsqueda de regalos pasa muy seguido que no encontramos ese producto exacto que al verlo digamos “yo veo ahí a esa persona” porque precisamente no existe una conexión entre la marca y el consumidor final, su función es la que necesito, pero sus características no me llevan a ver a esa persona exactamente en el producto entonces vuelvo y te pregunto ¿Qué vas a contar esta navidad? ¿Cómo conectarás con tu consumidor ya sea que el mismo compre para sí mismo o que otro compre para este? ¿Qué escenario le plantearas a tu cliente y consumidor este fin de año para que se imaginen viviéndolo con tu marca?
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