Ha llegado el último post de este 2019, un año que me lleno de un gran crecimiento personal y me deja con grandes sueños y metas por continuar cumpliendo y no podía despedir este maravilloso camino recorrido en estos 365 días del año sin compartir con ustedes lo que aprendí emprendiendo, enseñanzas que se han convertido en herramientas para fortalecerme y con ello continuar construyendo mi propio avión en este salto al vacío que ya lleva dos años y que se llama BUSINESS Á LA MODE:
1. Escuchar mi voz interior: Llámalo palpito, sexto sentido, dolor en la boca del estómago o presentimiento, pero es exactamente eso, cada vez que tomé una decisión debí aprender, a golpes debo confesarlo, a escuchar lo que internamente mi ser me estaba diciendo y aunque muchas veces simplemente ignore por terquedad con el tiempo entendí que mi propio ser o consciencia me estaba dando la respuesta idónea para cada momento desde el primer instante y con ello la tranquilidad que necesitaba para continuar con mis proyectos. Muchas veces ante una propuesta o un nuevo plan pasaba noches en vela o sencillamente con el paso del tiempo las cosas no iban como esperaba teniendo que escuchar por parte mía un te lo dije gigante, aprende a escucharte a entenderte porque solo tú sabes lo que deseas como emprendedor y el camino que tienes soñado con tus metas y aunque a veces olvidemos o intentemos ir por otro rumbo esa voz interior está ahí para hacérnoslo recordar.
2. Calidad por encima de cantidad: Soy una persona fiel creyente de las energías y de la manera como estas pueden fluir de manera positiva o negativa dependiendo de las personas y las situaciones, a medida que emprendemos y que vamos creciendo con nuestro emprendimiento muchas personas se irán acercando y a la vez en el camino vamos conociendo a otras cuantas, este año me dejo una gran enseñanza y es que la calidad prima por encima de cualquier cosa y que el rodearme de personas que vibren en mi misma sintonía es esencial, personas que realmente me apoyen, que puedan complementarme de manera profesional, que tengan una calidad humana sin igual y aunque mi circulo en muchos aspectos fue quedando reducido entendí que las personas que se quedaron en el eran aquellas que realmente le aportaban cosas valiosas a mi vida y yo a la de ellos. Esto mismo sucede con los proyectos, a veces nos llegaran muchas propuestas al mismo tiempo o en lo corrido del año, pero debemos aprender a evaluarlas ya que es mejor hacer una sola cosa con una calidad inigualable a mil por salir del paso.
3. Autoevaluarme: El emprender también es un camino de autodescubrimiento, aprendemos a entendernos de tantas maneras y a conocernos en todos esos aspectos que nos hacen como seres humanos y a veces en ese camino simplemente vamos avanzando y es por ello que se vale detenernos en algunos instantes y realizar una autoevaluación de nosotros mismos, a veces sentimos que estamos estancados, que no hemos avanzado y la frustración llega de manera inmediata, soltemos todo un rato y tomémonos el tiempo de pensar en nosotros, de evaluar todo lo que hemos logrado, la manera como el emprender me ha hecho crecer como persona, si las decisiones que he tomado han sido las correctas, la forma como me he comportado en ciertas situaciones e incluso si he descansado lo suficiente o me he alimentado de manera correcta, aunque suene gracioso o algo sencillo a veces olvidamos la importancia de evaluarnos a nosotros mismos lo cual es esencial para continuar emprendiendo y ese pequeño momento con nosotros mismos muchas veces es la inspiración que tanto estamos necesitando.
4. Metas personales y profesionales en armonía: Cuando estamos construyendo nuestro emprendimiento lo personal y lo profesional tiende a mezclarse un poco y es ahí cuando la confusión llega a nosotros o sencillamente no vemos avance alguno, es importante sentarnos a evaluar de manera independiente cuáles son nuestras metas personales y cuáles son nuestras metas profesionales y encontrar la manera de que estas vayan por el mismo camino, es difícil tratar de avanzar cuando queremos lograr nuestros sueños pero tenemos unas prioridades a manera personal que no podemos ignorar o dejar pasar, entendamos que ambas son fundamentales para nuestra realización como personas y que la una no puede diferir de la otra así que incluyamos ambas dentro de nuestro plan y que ambas sean una catapulta para la otra.
5. Confiar en lo que estoy haciendo: La duda es algo inevitable en este camino emprendedor y más cuando tenemos al lado personas que constantemente nos están preguntando si lo que hacemos si sirve, si eso si da plata, si de eso si vamos a vivir o tratan de decirnos cómo hacer las cosas. Confía en ti, en lo que deseas y en lo que estas creando, la clave al emprender es creer en nosotros mismos porque solo nosotros sabemos el porqué de nuestro emprendimiento y las metas que con este tenemos así que confiemos en nuestras decisiones, en nuestra intuición, pero sobretodo en nosotros mismos.
6. Prima la tranquilidad por encima de cualquier cosa: La tranquilidad es de esas cosas que para mí jamás será negociable, y aunque el emprender es una montaña rusa de emociones la tranquilidad es algo que es imprescindible dentro de este camino, tranquilidad en las decisiones que tomemos, tranquilidad con el camino que estamos siguiendo, tranquilidad incluso en nuestra vida personal para así poder avanzar en nuestra vida profesional. Cuando la tranquilidad hace parte de nuestros días la claridad aparece y con ello el crecimiento.
7. A veces más vale decir NO: Cuando comenzamos a crecer en nuestro emprendimiento muchas propuestas comienzan a llegar, propuestas que creemos no podemos dejar pasar porque si no como más vamos a avanzar pero en este camino emprendedor a veces lo más valioso para nosotros es aprender a decir NO, tomarnos el tiempo para evaluar cada oportunidad o propuesta, escuchar nuestra voz interior y saber si vale la pena tomar ese riesgo o por el contrario es algo que sencillamente no va con nosotros y la empresa que estamos construyendo, un no, no implica cerrar puertas por el contrario puede salvarnos de una mala decisión y con ello abrir camino a muchas nuevas oportunidades, no tengas miedo o no sientas pena de decir no, es algo totalmente valido y más cuando de tu empresa y tu vida se trata.
8. Se vale alejarse de ciertas personas: El emprender trae consigo un crecimiento personal invaluable y como lo dije anteriormente las energías son algo realmente poderoso pero el emprender es algo que no todos entienden y por ende llegan miles de comentarios a nuestros oídos de cuándo ganaremos plata, que eso no sirve, que ella no hace nada por la sencilla razón de que trabajamos desde nuestros hogares y cuando nos damos cuenta nos estamos cargando de una energía que nos debilita y nos hace dudar de nosotros mismos y aunque duela y cueste es la hora de aprender a soltar y dejar ir a esas personas que no creen en nosotros, alejarnos, un poco aunque sea, de ellas y cuando aprendemos lo valioso que es hacer este proceso es cuando comenzamos a ver como las cosas comienzan a fluir y como todo comienza a jugar a nuestro favor, a veces simplemente nuestro crecimiento va en otro camino al de ciertos amigos o conocidos o incluso familiares, lo cual no tiene nada de malo y es completamente normal y sencillamente es el momento de dejar ir, créeme que en el camino aparecerán más personas que apoyen lo que haces y que aunque suene feo, el depurar tu vida de ciertas personas es la manera más sana de avanzar y encontrar tranquilidad, de nada sirve aferrarnos cuando es algo que duele, cuesta aprenderlo y aplicarlo pero es realmente liberador.
9. No correr ni afanarme: Nos comparamos tantas veces en este camino del emprender simplemente porque creemos que otros van avanzando más rápido que nosotros que comenzamos a afanarnos y a correr a realizar cosas o aceptar oportunidades para luego estrellarnos fuertemente con la realidad, pero la verdad es que nadie sabe lo que hay detrás y no podemos dejarnos llevar por lo que vemos simplemente, pero más allá de ello debemos dejar de compararnos con otros emprendedores y entender que cada quien crece de manera diversa y que por ende el único crecimiento que debo evaluar y comparar es el propio, del afán solo queda el cansancio dicen por ahí y no se equivocan en lo absoluto, es mejor ir a paso lento pero seguro, evalúa cada propuesta que llegue a tu vida, cada nueva decisión, cada oportunidad antes de aceptarla por un afán.
10. No todo sale siempre según lo planeado: Calculamos tantas cosas en nuestras vidas y más cuando somos emprendedores que nos frustramos y desesperamos cuando sencillamente no sale de esa manera que esperábamos y es que así es la vida, nos tiene preparadas cosas diversas a las que esperamos en muchas oportunidades y aunque puede ser decepcionante debemos aprender a agradecer también por lo que no se da porque muchas veces cuando no salen nuestros planes es porque sencillamente la vida nos tenía preparado algo mejor o nos estaba cuidando de algo mucho peor que podía llegar a pasar, no te fuerces a realizar las cosas cuando estas no se dan, pero tampoco renuncies a la primera caída, no todo es color de rosa ni todo será perfecto pero el proceso es algo que se debe disfrutar y aprender a preguntarnos no por qué pasan las cosas sino para qué y encontrarle el sentido de ese giro inesperado para aprovechar lo nuevo que la vida traiga para nosotros.
Soy consciente que el emprender no es un camino fácil, pero es un camino maravilloso y realmente satisfactorio cuando aprendemos que para ver el éxito no debemos esperar a llegar al final con nuestros bolsillos llenos de dinero, sino cuando valoramos cada experiencia, cada crecimiento, cada nuevo aprendizaje y el saber que, aunque aún no hayamos llegado a nuestra meta hemos avanzado a pasos agigantados y lo más importante seguimos trabajando por nuestros sueños y creyendo en nosotros mismos.
Feliz año nuevo para todos y cada uno de ustedes, gracias por creer en mí que este 2020 nos traiga nuevas herramientas de aprendizaje y un crecimiento sin igual, pero sobre todo mucha felicidad.