Desde meses pasados la noticia de que la gran cadena de almacenes Forever 21 se declaraba en bancarrota genero una incertidumbre a nivel mundial acerca del mercado internacional y la capacidad de las marcas para competir en el pero sobre todo para mantenerse dentro del mismo, una noticia que dejaba en shock a más de uno al leer los titulares y es que no es para menos si algo como esto le sucede a una cadena de almacenes con tanto éxito y furor y tantas sucursales en el mundo qué puede esperarse entonces?
Pero la realidad de este asunto no se trata de una economía mundial en declive, o un mercado internacional difícil de afrontar y aunque muchos factores sociales, políticos y económicos influyen y afectan a las empresas y marcas de moda el caso de Forever 21 es el reflejo de aquella frase típica que dice “el que mucho abarca poco aprieta” sin duda un ejemplo perfecto para aprender de sus errores, pues cómo otras marcas del fast fashion como H&M o el grupo Inditex han logrado sobrevivir?
En un inicio Forever 21 fue la sensación al entrar en la moda del fast fashion y ofrecer las tendencias que grandes famosos y marcas internacionales debutaban en sus pasarelas pero a un precio completamente alcanzable por jóvenes y el público en general, sin embargo varios errores se fueron cometiendo en el proceso como lo es la falta de un estudio constante de mercado, entender que las generaciones cambian, evolucionan y que existen macro tendencias y situaciones sociales que afectan en gran medida las tendencias de consumo de ese mercado objetivo, la llegada de los millenials y la generación Z fue un llamado de atención para las marcas fast fashion, generaciones preocupadas por el ambiente y el cuidado del mismo buscando prendas de calidad pero a la moda para su día a día, generaciones que se alejan del consumismo gracias a un mercado con falta de oportunidades y que por tanto son más conscientes al momento de gastar su dinero, Forever se centró en ese consumidor que por años lo llevo al éxito sin estudiar el cambio y la llegada de estas nuevas generaciones y el impacto de las mismas así como sus necesidades, no se trata de cambiar la marca, se trata de tener los cimientos fuertes dentro de la estructura de la misma a tal punto de poder amoldarse y evolucionar junto al mercado manteniendo la esencia.
El segundo gran error de Forever 21 fue la falta de diferenciación, en un inicio fue algo innovador su idea de ofrecer moda al alcance de todos los bolsillos, sin embargo como es de conocimiento público el mercado crece cada día y con él la competencia, pensar que seremos eternos porque llegamos antes es un error, así como las marcas nuevas deben saber cuál es su valor agregado y su factor diferenciador, las marcas de trayectoria deben reevaluar aquellos aspectos que los hacen diferentes para mantener la confianza y fidelidad que han creado dentro del mercado, un error que no solo se aprecia en sus productos sino también en sus tiendas, qué experiencia deja un almacén de Forever 21? ¿Qué sensaciones y emociones transmite al público?
La calidad es uno de los factores comunes que más prevalecen actualmente al momento de realizar una compra por parte de los consumidores, prendas que sean durables con el tiempo porque han entendido que es preferible invertir un poco más en una prenda que les va a durar de ser posible años a invertir en una misma prenda cada 3 meses porque sencillamente con cada lavada y uso se desgasta, caso que muchas personas comenzaron a experimentar con las prendas de Forever 21 perdiendo la confianza en el producto.
Imagen tomada de: http://ar.marca.com
Forever 21 y las marcas fast fashion en general se están enfrentando a un mercado que ha despertado y que es consciente cada día más de la situación a la que se enfrenta el planeta tierra y la contaminación que el sector de la moda aporta, es así como estos consumidores exigen marcas amigables con el medio ambiente y prácticas productivas que reduzcan el mal uso de los recursos y la extinción de las especies, migrando a nuevas marcas que dentro de sus productos y procesos incentiven la moda verde, situación a la cual Forever ha hecho caso omiso.
Otros errores encabezan las causas del declive de este grande de la industria como su expansión masiva, la poca rentabilidad de algunas de sus tiendas y que creían podían compensar con aquellas que si tenían éxito, la copia de diseños de grandes marcas de manera descarada a un precio bajo, el uso de la tercerización y con ello la explotación de mano de obra, entre otras, pero para mí el mayor error de Forever 21 fue el confiarse de sus prácticas pasadas para mantenerse dentro del mercado, el no consolidar un ADN real ni diferenciador y basarse únicamente en la producción masiva para su éxito pero especialmente el no estudiar su mercado de manera constante, entender que nuevas formas de consumo llegan y que nuevas generaciones aparecen en el radar siendo potenciales clientes, esta falta de entendimiento y el confiarse en su sola presencia física fue lo que hizo que su aparición en redes fuera prácticamente nula aspecto esencial actualmente para estar a la vanguardia del mercado y hacer que nos encuentren de punta a punta del globo terráqueo subestimando a aquellos nuevos competidores que llegaban para satisfacer esas necesidades que Forever estaba pasando por alto, nuevas tiendas virtuales que ofrecían quizás lo mismo pero que virtualmente generaban una experiencia que conectaba a miles de personas.
El hecho de declararse en bancarrota no significa que Forever se vaya a acabar, alrededor de 305 tiendas serán cerradas sin embargo México y Latinoamérica continúan con la presencia de esta marca.
¿Y aún existen marcas que cuestionan la importancia de un ADN, actualización constante y factores de diferenciación para competir dentro del mercado? Recuerden que el que se duerme se lo lleva la corriente, aprendamos de este ejemplo.